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Shakira deslumbró con un show impresionante en la final de la Copa América 2024
La final de la Copa América 2024 fue un evento indiscutible, no sólo por la intensidad y calidad del fútbol mostrado, sino también por el espectacular show de medio tiempo que ofreció la reconocida artista Shakira. Con una puesta en escena que fusionó luces, efectos especiales y coreografías impresionantes, Shakira se robó el espectáculo, dejando una huella imborrable en todos los asistentes al evento y en aquellos que lo siguieron por televisión e internet.
Desde el momento en que se anunció que Shakira sería la encargada del show de medio tiempo, las expectativas eran muy altas. La cantante, conocida por sus potentes actuaciones y su habilidad para conquistar al público, no decepcionó. Con un repertorio que incluyó algunos de sus mayores éxitos, Shakira logró poner en pie a todo el estadio, demostrando una vez más por qué es una de las artistas más influyentes de la música latina y mundial.
Un inicio poderoso
El show comenzó con un despliegue de luces que inundaron el estadio, creando una atmósfera electrizante. Shakira apareció en el escenario luciendo un traje deslumbrante, perfectamente diseñado para la ocasión. Con su característica energía, dio inicio a su presentación con uno de sus temas icónicos, «Hips Don’t Lie». La respuesta del público fue inmediata: todos comenzaron a bailar y cantar al unísono.
- Repertorio lleno de éxitos: Shakira incluyó en su presentación canciones como «Waka Waka», «La Bicicleta» y «Loba», entre otros grandes éxitos.
- Coreografía impresionante: Acompañada por un grupo de bailarines, la coreografía fue uno de los puntos fuertes del espectáculo, destacando por su precisión y sincronización.
- Interacción con el público: Shakira supo cómo conectar con los asistentes, invitándolos a participar y haciendo que el estadio vibrara con cada canción.
Momentos destacados del show
Uno de los momentos más emotivos fue cuando interpretó «Waka Waka (This Time for Africa)», una canción que ha trascendido fronteras y sigue siendo un himno en eventos deportivos. La reacción del público fue impresionante, coreando la canción y levantando sus teléfonos móviles, creando un mar de luces que iluminó el estadio.