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Ajo crudo: el poderoso remedio que cura enfermedades. Descubre cómo activarlo

El ajo, una humilde verdura que a menudo se encuentra en nuestras cocinas, esconde un poder increíble en su interior. Este pequeño bulbo blanco, con su aroma distintivo y sabor fuerte, es un tesoro de beneficios para la salud que pueden sorprender incluso al más informado de los gourmets.

Lo más asombroso de todo es que los beneficios del ajo no se limitan a un solo aspecto de nuestra salud. Desde la presión arterial hasta la circulación sanguínea, desde la prevención del cáncer hasta la reducción de la inflamación, el ajo tiene un impacto positivo en una multitud de condiciones de salud. Y lo que es aún más impresionante es que estos beneficios pueden multiplicarse, proporcionando un efecto compuesto que puede mejorar significativamente nuestra salud y bienestar general. Así que la próxima vez que veas un diente de ajo, recuerda que no es solo un ingrediente de cocina. Es una verdura increíblemente poderosa que puede jugar un papel crucial en mantenernos saludables. ¡El ajo realmente es increíble!

Activando el ajo

Activar el ajo, machacándolo
El ajo puede ayudar a reducir la presión arterial y el colesterol, lo que contribuye a la prevención de enfermedades cardiovasculares

Es esencial saber que el ajo requiere activación. ¿A qué nos referimos con esto? El ajo contiene un compuesto llamado lisina. La lisina es responsable de la mayoría de los beneficios saludables del ajo. Sin embargo, hay un desafío con la lisina. Cuando se consume un diente de ajo crudo, contiene una gran cantidad de lisina. Pero esta lisina está en un estado inactivo y no puede proporcionar beneficios para el cuerpo en este estado. Para que la lisina pueda desempeñar sus funciones beneficiosas, necesita ser activada.

La activación de la lisina es un proceso simple. Se puede lograr picando, aplastando o triturando el ajo. Al observar el ajo bajo un microscopio, se puede ver que la lisina y otros compuestos están separados en diferentes compartimentos, similares a un panal de abejas. Al picar, aplastar o triturar el ajo, estos compuestos se unen y la lisina se activa.

Además, es importante permitir que el ajo repose durante 2 a 3 minutos después de triturarlo. Por lo tanto, el primer consejo práctico es activar el ajo antes de consumirlo. Esto asegura que se obtengan todos los beneficios saludables que el ajo tiene para ofrecer.

Ajo crudo vs. ajo cocido

Recomendación de consumo de ajo crudo o cocinado
El ajo posee propiedades antibacterianas y antifúngicas, que lo hacen un aliado natural en la lucha contra infecciones

El consumo de ajo crudo es preferible debido a sus beneficios para la salud. Sin embargo, puede causar hinchazón y malestar en algunas personas. El calor prolongado puede dañar los compuestos beneficiosos del ajo, como la lisina y otros antioxidantes. Si se decide cocinar el ajo, se recomienda hacerlo a no más de 60 grados y durante no más de tres minutos para conservar la mayoría de sus beneficios. Añadir un poco de aceite de oliva y mantener una temperatura baja en el horno durante 2 a 3 minutos puede ayudar a preservar sus propiedades.

Ayuno o con el estómago lleno

Es un error común pensar que el ajo debe consumirse entero y con el estómago vacío. En realidad, el ajo debe cortarse, triturarse y dejarse reposar antes de consumirlo. Consumir ajo con el estómago vacío puede exacerbar sus efectos secundarios, que pueden mitigarse al comerlo con otros alimentos. Se recomienda consumir uno o dos dientes de ajo al día, pero es importante variar la dieta para obtener una gama completa de nutrientes.

El ajo tiene varios beneficios para la salud, incluyendo la reducción de la presión arterial. Los compuestos en el ajo, como la lisina, pueden dilatar las arterias y facilitar el flujo sanguíneo, lo que puede disminuir la presión arterial. Estos beneficios se ven potenciados por una dieta saludable, ejercicio, reducción del estrés y un buen sueño.

Además, el ajo puede mejorar la salud de las arterias al contener sustancias anticoagulantes y antiinflamatorias. Consumir ajo diariamente se ha relacionado con una disminución de los marcadores de inflamación, lo que puede mejorar la salud de los vasos sanguíneos.

Es importante recordar que la presión arterial alta a menudo no presenta síntomas, pero puede causar daño a largo plazo al corazón, cerebro, arterias y riñones. Por lo tanto, es esencial controlar la presión arterial, llevar un estilo de vida saludable y consultar regularmente a un médico. Aunque puedes tener presión arterial alta y no sentir nada, puede estar causando daño a tu cuerpo.

Beneficios para la circulación sanguínea

Beneficios del ajo para la circulación
El contenido en antioxidantes del ajo, puede proteger al cuerpo contra el daño de los radicales libres y apoyar el sistema inmunológico

Vamos a ver qué puede hacer a nivel de la circulación. En la circulación, el ajo, dilata las arterias, permite que la sangre circule mejor. Pero también se ha visto que los compuestos presentes en el ajo pueden reducir la formación de coágulos porque hacen que la sangre sea más líquida y circule más fácilmente. La presión arterial alta, que el ajo podría disminuir, son las principales causas de ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares y daño renal.

Los efectos secundarios y cómo evitarlos

Ahora, ¿cuáles son los efectos secundarios del ajo y cómo puedes evitarlos? El ajo, especialmente si se come en ayunas y crudo, es muy irritante para el estómago. Para algunas personas causa malestar, dolor abdominal, hinchazón, flatulencia e incluso diarrea. Todos estos efectos se pueden reducir un poco consumiéndolo cocido, recordándolo muy poco y a baja temperatura, y evitando consumirlo con el estómago vacío. Por otro lado, hay personas que simplemente son más sensibles al consumo de ajo y si este es tu caso, tal vez debas disminuir la dosis o buscar otros alimentos saludables.

Por otro lado, otro efecto secundario muy común en el ajo tiene que ver con dolor abdominal, tipo gases, así como hinchazón y eso tiene que ver con una sustancia especial que es un tipo de azúcar llamada fructanos. Los fructanos son difíciles de digerir para los seres humanos. Se acumulan en tu intestino, generan gases, te hinchan, te distienden, te causan dolor abdominal. Todo esto se puede evitar comiendo ajo parcialmente cocido y acompañado de otros alimentos. Sin embargo, esto es mucho más común en pacientes que tienen síndrome de intestino irritable, en pacientes que tienen sobrecrecimiento bacteriano u otros problemas intestinales. Si este es tu caso, debes consultar a tu médico para ver qué otros alimentos saludables te puede recomendar.

Y por último, un efecto secundario bastante común del ajo es la alergia. Muchos pacientes son alérgicos al ajo y al comerlo les produce picazón en la piel, les salen ronchas rojas, les irrita. En estos casos no debes consumir más ajo porque incluso podría ser peligroso.

Entonces. ¿A qué esperas para consumir ajo de la mejor manera? ¿Crudo, machacado, triturado o cortado? Después de reposar durante 2 a 3 minutos y principalmente con alimentos para obtener beneficios en la presión arterial, la circulación sanguínea, el cáncer e incluso la inflamación.

El video original puedes verlo pinchando AQUÍ

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